Misas por los seres queridos fallecidos
Vivir la pérdida de alguien que amamos es profundamente triste, pero podemos brindar algo de consuelo a nosotros mismos y a las personas que amamos a través de la fe y el don de la oración.
Las Misas Gregorianas son una intención única de 30 Misas que comienzan poco después de la muerte de un ser querido, para alcanzar su estado de gracia y prepararlo para entrar en el reino de Dios. Son una serie de 30 Misas celebradas durante 30 días consecutivos, sin interrupción, por el alma de su ser querido.
Si desea pedir Misas Gregorianas a un fallecido, utilice el siguiente formulario.
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